viernes, 18 de julio de 2008


En busca del plano corporal





Unos de los ejercicios derivados de Lab, es la aplicación de plano no solo como dibujo arquitectónico. Para ello ha sido necesaria la determinación de cuál sería el plano de mi cuerpo: una radiografía, un dibujo?. Desde esta pregunta he establecido el dibujo figura humana como mi plano, como la estructura analítica que actuará en mi obra, como contenedora de mi intimidad.

Mi acercamiento a la figura humana fue desde el colegio a través de la teoría de las proporciones de las 7 cabezas, sin embargo, esa teoría es la que permite realizar una estructura universal, sin necesidad de un modelo, basándose en proporciones generales por lo que no identifica un cuerpo en particular.

Posteriormente trabajé muchas veces como modelo de desnudo en figura humana, con distintos artistas y en distintas instituciones, reconociendo entonces otras formas de abordar un cuerpo, ya sea desde el volumen como desde los vértices divididos. Esta última "técnica" permite una nueva teoría que no se basa en las siete cabezas como regla, sino en la identificación de las líneas corporales de un sujeto en particular, trabajando desde la absoluta necesidad de la observación de un modelo.


Esta "estructura analítica" es la que he de utilizar en la creación de mi plano corporal, ya que desde la fijación de líneas de apoyo y desde el vértice que las une de desprenden líneas que han de identificar mi cuerpo en particular. Esta estructura trabaja en estratos, en jerarquías de módulos corporales, construye desde dentro hacia afuera, no tiene que ver con el contorno sino con la construcción fragmentada, naciendo desde los ejes del cuerpo (líneas centrales) pero siguiendo las direcciones del esqueleto.
imagen proporciones www.www.mailxmail.com/curso
dibujo fig humana. www.clases-arte.blogspot.com (Ricardo Pizarro)

miércoles, 9 de julio de 2008

El plano como constructor del espacio íntimo.

Hasta ahora no había querido indagar aún sobre el concepto de intimidad ni en cómo esta se construiría dentro de la obra que pretendo realizar, sin embargo, entre textos y referencias ha sido imposible mantenerlo totalmente al margen, convirtiendo este en mi primer intento.
En ejercicios anteriores me he enfocado principalmente en el hacer cotidiano, reconociendo a la casa tal, como lo dijera Bachelard "como el primer espacio privado, el primer lugar de la cotidianeidad" (2). Estas dos afirmaciones que me detienen en la casa por su carácter de privado, de propio, pero también, por que es un elemento de integración psicológica (3) en que lo privado se construye desde lo propio, desde lo personal, desde lo íntimo.

Ya Conociendo que los conceptos que cruzarán mi proyecto son privado, íntimo, cotidiano, en Lab se ha cuestionado la relación entre estos conceptos, especialmente el de la intimidad, esto porque lo cotidiano, lo privado, la casa o una habitación hacen referencia al espacio físico o a la manifestaión corporal, por el contrario, la intimidad, aún al ser aplicado exclusivamente a lo privado, se refiere a lo interno, a lo subliminal, no corresponde al mundo palpable, sino al de las ideas y los sueños, hacen relación con la profundidad psicológica y valórica del ser humano suponiendo un problema casi existencial que difiere con los términos prácicos y reales que cruzan los demás conceptos.
En una de las sesiones de Lab de pruebas, mi compañera Javiera Piriz, acerca de mi obra, planteó el problema de cómo habitarse así mismo, frase que encausó parte de esta etapa ya que me hizo reconocer al cuerpo como contenedor de lo íntimo, haciendo una directa relación a la casa como contendor de lo cotidiano y ambas relaciones superponiéndose en el espacio privado. Es así como una de las determinaciones que tomé en torno a la representaión de lo íntimo, fué la de graficar de alguna forma este mundo tan subjetivo, llegando a la imagen del plano arquitectónico como una posible solución.
El plano es un dibujo que representa en detalle un cuerpo a construir o ya costruído, determina la distancia relativa entre los objetos o el asunto que lo componen, por lo tanto, me parece una eficiente forma de graficar al cuerpo como el espacio contenedor de la intimidad, pero además como un cuerpo que permite ser habitado por lo personal. por sí mismo.
(2) (3) Gastón Bachelard, La poética del espacio, capítulo 1.
Plano arquitectónico I. Imagen extraída de www.vivehogar.com